Hay muchos tipos de pruebas genéticas. Pero muchísimos. Tantas categorías que algunas hasta tienen categorías propias dentro, como las pruebas de ADN genealógico.
Estas pruebas abarcan todos los análisis genéticos cuyo objetivo sea aportar información sobre la historia familiar y el linaje de una persona. Esto incluye desde los que se realizan para elaborar el árbol genealógico de una persona hasta los que establecen la mezcla étnica de un individuo.

¿De dónde proviene la información de nuestras pruebas genéticas?
Según el objetivo del análisis, unas regiones del genoma tienen más interés que otras. Las principales regiones estudiadas se pueden clasificar en:
- El ADN autosómico es el analizado mayoritariamente. Es el ADN que se encuentra en los cromosomas autosómicos, que son los pares de cromosomas desde el 1 hasta el 22. Todos los cromosomas no sexuales son autosómicos, lo que implica que estas pruebas de ADN aportan enormes cantidades de información. Son los mejores para encontrar parentescos y aprender sobre una persona.
- El ADN mitocondrial es el analizado para establecer el linaje o haplogrupo materno. El ADN mitocondrial es casi siempre transmitido enteramente por la madre, aunque se han comprobado casos excepcionales de heredabilidad mixta. Sin embargo, en estos casos las mitocondrias maternas son más abundantes. Lo que quiere decir que el ADN mitocondrial de la madre sigue siendo el más abundante. La idea es aprovechar este material genético para averiguar la historia de la familia materna, retrocediendo en el tiempo de madre en madre.
- El ADN del cromosoma Y es el analizado para establecer el linaje o haplogrupo paterno. El cromosoma Y solo se transmite, y lo tienen, los varones. Lo bueno de este hecho es que, similar al ADN mitocondrial, permite retroceder en el tiempo de padre en padre siguiendo su historia. Lo malo es que, al no tenerlo las mujeres, no pueden realizarse este estudio. Una mujer que quiera saber su haplogrupo paterno necesita que su padre o sus hermanos (si los tiene) se hagan la prueba. Sus hijos no servirían, ya que tendrían el cromosoma Y del padre, mostrando entonces la historia familiar de la otra rama.
Dentro de los análisis autosómicos enfocados en la genealogía de una persona tenemos los llamados test de ADN de orígenes, de ancestralidad o de ancestros.
¿Sabes de dónde proviene tu genoma?
La respuesta más corta son tus ancestros. El significado de ancestro es aquella persona de la que desciendes, tu antepasado. Normalmente se usa para referirse a un antepasado alejado en el tiempo, nadie dice que sus padres o sus abuelos son sus ancestros.
Suena raro, aunque sea correcto.
Sin embargo, estos test de ADN no se centran en los lazos de parentesco y los árboles genealógicos, sino que buscan establecer la etnia y origen geográfico de la persona que realiza la prueba.
Analizando variantes genéticas que se transmiten de generación en generación, pretende obtener su ascendencia, y determinar qué proporción de su genoma proviene de poblaciones específicas y regiones del mundo.
Sin embargo, no es un viaje en el tiempo de esa manera fantasiosa y maravillosa que mucha gente imagina. Después de todo, es ciencia, y no magia.
Para realizar estos análisis se dispone de la información de decenas de poblaciones de referencia, compuestas por miles de voluntarios, archivada en bases de datos.
Cuando una persona realiza un test de ADN de ancestralidad, se estudian variantes genéticas concretas. Estas variantes han sido demostradas, por estudios previos aprobados y revisados, que son características de poblaciones concretas y/o áreas geográficas.
Gracias a comparar las variantes detectadas en el usuario con las que pertenecen a las poblaciones de referencia en las bases de datos, se establece una comparativa. Cuantas más variantes de un grupo poblacional haya en común, más porcentaje de esa etnia se asume que tiene la persona en cuestión.
Las últimas actualizaciones en nuestro test de ADN de ancestralidad
Te ofrecemos uno de los mejores test de ancestralidad del mercado.
Y acaba de actualizarse para ser todavía más potente.
De 53 grupos étnicos que teníamos previamente en nuestros estudios, hemos incorporado grupos nuevos, y otros se han dividido en subcategorías. Ahora somos capaces de percibir distinciones entre subpoblaciones que antes escapaban a nuestra capacidad.
El genoma de nuestros usuarios se compara con 93 poblaciones finales de referencia distintas, para asignar sus grupos étnicos.
Desde las regiones polacas en Europa hasta Papúa en Oceanía, encontramos aquellos marcadores genéticos que cuentan la historia de tus antepasados y sus movimientos, y te la contamos en un sencillo informe.
Estas modificaciones también las notarás en las descripciones de las poblaciones genéticas de las que disponemos y sus regiones geográficas.
En ellas podrás aprender no solo tu ascendencia, sino los cambios históricos en esas zonas y etnias que las han llevado a la actualidad. Y, colateralmente, que las han llevado hasta ti.
Siguiendo nuestra línea de trabajo habitual, esta inmensa actualización te la ofrecemos al coste normal de cero.
No tienes que pagar ningún añadido, registrarte en una aplicación o solicitar herramientas. Realizaremos las actualizaciones de las cuentas de los usuarios a cambio de nada.
Pero si no te gustan tus nuevos resultados y consideras que los anteriores eran más acertados, comprendemos tu punto de vista.
No llevas años contando a tus amigos que eres completamente italiano para que ahora te pongamos un 5% de francés.
Puedes mantener los datos de ancestralidad previos, sin problemas ni condiciones.
Nosotros lo hacemos todo.
A ti solo te pedimos entusiasmo y capacidad de maravillarte.
Si tú aun no tienes tu test de ancestralidad, pero nosotros tenemos tu curiosidad, el test de ADN de tellmeGen es una opción perfecta para que consigas respuestas. Haz la prueba para conocer tu pasado.